...Troya decidió que no  iba a arder

Tú cuidarás de mí... Hasta que nos volvamos a ver

No hay nada más triste que echar de menos, de verdad. Pasan los días y aquí seguimos igual, recordándote cada día y cada recuerdo contigo; tus chistes, tus abrazos, tu mirada agradecida y tus cariñosos nombres hacia nosotras. Dicen que una persona no muere mientras alguien siga recordándole, siguiendo esta razón a ti te quedan unas cuantas décadas. Hoy, hace 365 días que ya no estás, en los que cada día además de entrarnos ganas de llorar has conseguido sacarnos una sonrisa. Ojalá pudieras volver aunque sólo fuera un día,  y dejarnos despedir de ti como merecías. Se echa mucho de menos verte por aquí, y que alguien me llame "pingüino". La verdad, que alguien desaparezca para siempre y no se pueda hacer nada para evitarlo, hace que se acumulen ganas de gritar. Como cada día estás entre nosotros, pero hoy, más que ningún otro. Está claro que hay personas que deberían ser eternas.

Echar de menos siempre ha sido una putada. 

I'm bleeding out for you

MENTE FRÍA.  Esa es la clave. 

Te cambio un sí por ese "ya no puedo"

"Hay muchas formas de quererse, ¿sabes? pero la suya era... Total. Un amor puro, increíble, alucinante. Un amor especial como hay pocos. Y ellos lo sabían. Todos los enamorados del mundo creen que su amor es único y distinto, pero el de ellos sí lo era. Estaban hechos el uno para el otro, se tenían y deseaban fundirse en uno solo, cuando estaban juntos el tiempo se aceleraba, y cuando estaban separados se hacía eterno. Cada beso, cada caricia, era un puro sentimiento desnudo. Podían pasarse horas mirándose a los ojos y nada más, pero cuando se acariciaban, se besaban... Entonces... No hay palabras para describir esa emoción."

[...] ¿Y qué?  ¿Quieres ser grande? Pues ten el valor de pegarte el tortazo y seguir adelante. Haz que se pregunten por qué sigues sonriendo. Esa es la autentica grandeza. 

"Se buscan noches sin lagrimas"

Las noches están llenas de ojalás

Es necesario dormir para dejar de pensar, cosa que siempre sirve como excusa para poder hacerlo más. Pero la verdad es que no hay nada más bonito que un sueño, una meta que quieres, que deseas... Que acabas ansiando. Ser capaz de reconocer tus sueños es un logro; un logro que si paras a pensar todos hemos conseguido alguna vez. Un sueño no es sólo la casa más grande y bonita, un príncipe azul, un armario lleno de tu ropa preferida, ni una colección de los perfumes que siempre has querido. Un sueño logrado es cualquier cosa propuesta en un pasado que ya has conseguido, llegar a esa meta... Pero no se puede dormir eternamente,  a veces ni los sueños son buenos, si los sobrepasas, resbalas en la meta y llegas a destrozar  todo lo que has hecho. A veces es necesario saber parar, conocer tus límites, aprender a frenar y a pensar si ese es tu sueño o te has desviado.

Siempre creemos saber todo y de todo, pero ni siquiera sabemos quiénes somos nosotros mismos, y por eso es necesario parar echarnos un vistazo, ver qué llevamos puestos, a qué o a quién olemos, de quién dependemos, en quién nos hemos convertido y quiénes queríamos ser. Aprender a controlar nuestras debilidades,  a tomar decisiones, a poner en orden todos los pasos que hay que seguir para llegar a tu meta, porque la meta es tu felicidad, y cada uno tiene su camino hasta ella. Unos se cruzan y se confunden entre ellos, otros se juntan, y en ocasiones uno puede pasar por encima de otro y desbordarlo todo. Por eso son necesarios los sueños,  aunque suene egoísta,  cada persona tiene su meta desde que nace, y toda relación con cualquier persona distorsiona en algo tu camino o le pone un obstáculo.  Da miedo cómo alguien puede influir sobre todo lo que otra persona siempre ha querido. Para mi esa es la razón por la que no es bueno dormir siempre, y que a veces necesitamos hacer un descanso, y decidir por nosotros mismos...

"Ante la duda..."

Puede ser que este sea el error más grande de mi vida. El que hace que sean las cuatro de la mañana y lleve casi tres horas intentando dormir, pero no  solo me ha quitado tres horas de sueño,  sino casi dos semanas. Quién sabe si es lo correcto... pero al fin y al cabo la vida está para equivocarse... ¿verdad?