27 September, 2012

Hoy me apetecen curvas, y conducir caricias por tu piel. Tirarme de cabeza en el verde de tus ojos, nadar en él y que me ahogues entre mil abrazos. Hoy me apetece llamarte ''guapo'', leerte en los versos que escriben tus labios y ensayarte sonrisas. Hoy me apetece dormir contigo, y que me despiertes mañana; soñarte en mis pesadillas y que me rescates desde el otro lado de la cama. Hoy me apetece besarte y que me comas a besos. Buscarte entre las sábanas,  y decirte, que te he echado de menos.

16 September, 2012

Never say never

"Amar es como una droga. Al principio hay una sensación de euforia, de entrega total. Después, al día siguiente quieres más. Todavía no te has enviciado, pero te ha gustado la sensación, y te parece que puedes mantenerla bajo control. Piensas en la persona amada durante dos minutos y la olvidas durante tres horas.
Pero al poco tiempo te acostumbras a esa persona, y pasas a depender totalmente de ella. Entonces piensas en ella durante tres horas y la olvidas durante dos minutos. Si no está cerca, experimentas las mismas sensaciones que los viciosos cuando no consiguen droga. En ese momento, así como los viciosos roban y se humillan para conseguir lo que necesitan, tú estás dispuesto a hacer cualquier cosa por el amor." 

12 September, 2012

'Dándonos más besos que estrellas saldrán hoy'

Es increíble cómo los caminos de dos personas pueden cruzarse de pronto, ponerlo todo patas arriba y robarle el sentido a cualquier cosa existente durante ese trayecto, excepto el de la persona que camina a tu lado: tu compañero. Qué más dará que haya piedras en el camino si está él para no dejar que caigas y tú para no dejar que él tropiece. Poco a poco, lluvia a lluvia, trueno a trueno y estrella a estrella él está a tu lado. Así. De un día para otro llega alguien y te cambia la vida; para cuando te das cuenta de que nada más importa ya es demasiado tarde para retroceder. Así es. Así es él. Sé lo que es empezar a preocuparse por sus miedos y pesadillas sin darme cuenta. Aprenderse de memoria su número de teléfono, sus manos, su piel, y hasta su horario. Sé lo que es sobrepasar con creces los topes de la amistad a su lado. Eso está demasiado claro. Sé lo que es llegar a depender de él; y que mis piernas sólo se muevan si él anda. Sé lo que es sonreír si él sonríe, llorar si llora, gritar si grita, y llegar a suspirar si bosteza. Sé lo que es pararse a pensar que él es la razón más importante por la que te levantas cada día. Y sé lo que es que te tiemblen las piernas si te mira y sonríe. Sé lo que es ver fuegos artificiales a su lado y sentir que tus propios latidos triplican su sonido. Sé lo que es oírle decir que quiere respirar mi aire y que inevitablemente se me corte la respiración. Sé lo que es besarle sonriendo, pero también sé lo que es besarle llorando. Sé lo que es querer soñar que sueño con él y sé lo que es que se te ponga la carne de gallina si noto su aliento en mi oído. Sé lo que es sentirse segura y protegida si estoy con él. También sé lo que es quererle, y eso no creo que sea fácil de olvidar. Admito que ni sé, ni sabré explicar la sensación de sentirte tan llena y completa al ver una de sus sonrisas y saber que tú eres el motivo. Que todo esto, lo sé porque sé lo que es ser su mejor amiga, pero también sé lo que es ser su pequeña.